Me siento desgarrada, herida y mancillada.No puedo soportar tanta violencia.
Me gustaría ponerme a su lado y mirarlos a la cara.
Soy ella.
NO a la lapidación de Sakineh Mohammadi Ashtiani
Tantos golpes son la cobardía prepotente alzada bajo el signo de un dios ausente.
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Límites sociales arbitrarios, penalizados por la soga, la hoguera u otra atroz razón de la sinrazón.Víctimas de mentes torcidas.Líderes que conducen al vacío de la nada, arropados en la interpretación de un dios a su medida mal trazada.
ResponderEliminarFui uno de los primeros firmantes de la petición que Amnistía Internacional mandó al gobierno iraní pidiendo la liberación de Sakineh. Porque hay que tener en cuenta que en el primer juicio fue declarada inocente, sin embargo, algunos miembros de la familia del marido, que tiene mucha fuerza dentro del partido del actual presidente Admadineyah, consiguió que se declarara la nulidad del mismo y que en un siguiente juicio se invalidaran pruebas que demostraban la inocencia de la mujer.
ResponderEliminarSi la lapidación y la pena de muerte en general, ya son una barbarie, la corrupción de la justicia no lo es menos... aunque ahí nuestro país no es digno de tirar la primera piedra.